por TempleGrup El certificado de eficiencia energética es un documento obligatorio para vender o alquilar una vivienda. Se trata de un documento oficial que certifica el grado de eficiencia de un inmueble en base a unos cálculos concretos. Después de haber realizado los cálculos correspondientes, el edificio obtendrá una calificación energética con una u otra letra.
Aquí se tienen en cuenta factores como la calefacción, la iluminación, la producción de agua caliente, la refrigeración o la ventilación. Juegan un papel determinante en la ecuación, como el tipo de ventanas, los cerramientos exteriores, las carpinterías o los sistemas de climatización.
En función de la calificación energética de la vivienda, el certificado se expresará con una letra de la A a la G. De este modo, si una vivienda es clasificada con una A, significa que consume un 90 % menos de energía que cualquier otra calificada con otra letra inferior. Una vivienda de clase B consume un 70 % y una de clase C, un 35 %.
¿Dónde puedo conseguir el certificado de eficiencia energética?
Como te indicábamos al principio, el certificado de eficiencia energética es imprescindible siempre que quieras vender o alquilar un inmueble que tienes en propiedad. El documento debe estar redactado por un técnico competente, según lo que establece el Real Decreto 235/2013. Puede hacerlo cualquier profesional que cuente con una titulación académica o que lo habilite para la redacción de proyectos, la dirección de obras y dirección de ejecución de obras de edificación. También aquellos profesionales que puedan llevar a cabo proyectos de instalaciones térmicas.
Así pues, para conseguir el certificado energético de tu vivienda, será necesario que acudas a un despacho de arquitectura: arquitectos, aparejadores o ingenieros están habilitados para hacerlo. También puedes buscar un profesional autorizado en tu zona, a través de un colegio profesional.
Registrar el certificado energético
Cuando hayas obtenido el certificado de eficiencia energética, todavía tendrás que dar un paso más. El técnico que haya redactado el certificado te entregará un documento firmado. Este tiene que presentarse en el registro de certificados de eficiencia energética de la comunidad autónoma en la que se encuentre la vivienda.
No obstante, y para hacer menos complicado el trámite, los profesionales que se encargan de emitir la certificación también pueden presentarlo al organismo competente, previa autorización por parte del propietario de la vivienda.
¿Hay excepciones?
Aunque se trata de un documento obligatorio, hay excepciones. No es necesario que presenten el certificado energético los edificios protegidos oficialmente, por contar con un valor arquitectónico o histórico. Tampoco los que se utilicen como lugares de culto y actividades religiosas, edificios industriales, agrícolas, edificios aislados con una superficie inferior a 50 metros cuadrados o que sean adquiridos para grandes reformas o demoliciones.
También quedan exentos los edificios que se usen menos de cuatro meses al año o con un consumo energético inferior al 25 % de lo que se debería consumir en un año.
FUENTE: noticias.habitaclia.com
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